Author: Charles H. Spurgeon

Publisher: Felipe chavarro

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Total Pages: 60

ISBN-13:

Con cientos de miles de muertos a raíz de nuestra pandemia mundial, la sombra del Rey de los Terrores ronda las mentes de las personas en todo el mundo. Por tanto, pensemos, hablemos y recemos sobre la muerte. Para instarles en esa dirección, les presentamos el último número del FGB: La muerte y el morir. Christopher Bogosh introduce el tema describiendo las tres muertes que aparecen en las Escrituras: la física, la espiritual y la eterna. David Martyn Lloyd-Jones nos dice que, en contra de la opinión moderna, la Biblia enseña claramente que la muerte no es el cese de la existencia y que el alma humana es inmortal. Charles Spurgeon explica que la muerte es nuestro enemigo, que entró en la experiencia humana por el pecado; ¡pero Jesucristo la ha vencido! A continuación, Christopher Bogosh desafía la idea moderna de la muerte cerebral y nos ofrece, en cambio, el testimonio de la Palabra de Dios sobre la muerte. Robert M'Cheyne nos dice que el mundo teme la muerte y lo que le sigue; pero nuestro Padre celestial y el Espíritu Santo declaran: "Benditos sean los muertos". ¿Piensas en la muerte? ¿Has meditado alguna vez sobre la muerte? Thomas Boston explica la meditación paso a paso y luego da un maravilloso ejemplo de una meditación sobre la muerte. Ahora, ¿qué pasaría si murieras en tus pecados este año? ¿Has considerado lo que perderías en este mundo y en el mundo venidero? Samuel Davies nos presiona para que consideremos nuestra pérdida eterna si morimos en nuestros pecados. Para muchos, la preparación para la muerte significa un testamento y una póliza de seguro. Pero un tercer artículo, provocador y útil, de Christopher Bogosh, nos enseña cómo orar para prepararnos para la muerte: orar para obtener una clara evidencia de la salvación, para renovar el hombre interior y para ser equipados por Dios para afrontar la muerte sin miedo. Los cristianos nunca se sorprenden al saber que los incrédulos temen la muerte y no están dispuestos a morir. Pero no debería decirse lo mismo de los creyentes. Para nuestra sorpresa, muchos creyentes parecen no estar dispuestos a morir. Thomas Brooks aplica las Escrituras para movernos, no sólo a estar dispuestos a morir, sino a desearlo de corazón. Por último, la muerte es una parte, una parte terrible, de la maldición de Dios sobre el pecado. Sin embargo, Octavius Winslow pinta la preciosidad de la muerte del creyente con trazos tan gloriosos que nuestros corazones se ven arrastrados a escenas impresionantes y majestuosas del amor de Dios por nosotros, el deseo de Dios por nosotros, la alegría de Dios en nosotros y el triunfo de Cristo por nosotros. Si lo lees con atención, te hará suspirar por la muerte y la eternidad con el Señor resucitado de la gloria. Yo voy a morir. Tú también. Y nuestra cita ineludible está un día más cerca. Pero el Rey de reyes ha vencido al Rey de los terrores: Muramos bien, confiando en Cristo.